Dentro de la Planificación Territorial muchas veces hay alguien que olvida el factor “movilidad”. Si decidimos construir un polígono industrial a las afueras de nuestro municipio deberemos tomar en cuenta lo que va a suponer en termino de desplazamiento, la ubicación de dicha estructura en la zona afectada. Existen unos equilibrios muy delicados. El cambio y la “entropía” nos enseñan que una actuación puede a veces generar unos problemas muy gordos. El cambio es algo necesario y como siempre digo es mejor tomar una mala decisión que tomar ninguna pero hay que tener una visión más amplia de las variables que entran en juego a la hora de actuar en el territorio. A parte los vínculos medioambientales existen otros vínculos oscuros y escondidos. ¿Cuantos coches van a desplazarse hacia la nueva zona industrial?, ¿de donde vienen, a que hora y de que forma esto afecta al sistema?
Hay que elevarse y ver las cosas desde una nueva perspectiva. No es suficiente coger un mapa y trazar unas lineas para decidir las actuaciones.
Algunos consejos
Antes de todo es necesario un Plan de Movilidad, esto esta muy de moda y mucha veces viene acompañado de la palabra “sostenible”. No hay que olvidar que las actuaciones en los municipios limítrofes siempre impactan sobre las nuestras. Por ello los planes de movilidad nacen desde dentro hacia fuera. Por ello es necesario siempre contar con una visión macro territorial.
Compartir y no combatir. En estos años de peleas con diferentes proyectos estratégicos siempre me he encontrado con enfoques únicos y absolutistas, me he encontrado con ayuntamientos que actúan en el territorio sin tener en cuentas las características y las necesidades de “los vecinos”. Esto tiene que acabar, hay que ir a una búsqueda de intereses territoriales en un diseño estratégico compartido del territorio, que tenga en cuenta no solo los factores medioambientales sino que cuenten con una visión sistemica del territorio y la hora de actuar sobre el mismo.
¿Que es un plan de Movilidad?
La congestión crónica de nuestras ciudades y lo que supone el coste de la energía y sobre todo los importantes efectos generados por las emisiones producidas están condicionando la forma de movernos en la Territorio. El uso del coche para la mayor parte de los desplazamientos, la concentración de trayectos en horas punta e, incluso, el modelo de urbanización, disperso y alejado de los centros urbanos han generado modelos de movilidad que están en profunda revisión.
Últimamente muchos ayuntamientos grandes o pequeños utilizan la herramienta de los Planes de Movilidad Urbana Sostenible (PMUS) como nueva iniciativa para establecer formas de desplazarse más sostenibles, utilizar modos de transporte más eficientes y reducir el impacto sobre los ciudadanos y el medio ambiente.
En la actualidad Synergo! colabora con diferentes entidades gubernamentales en el diseño de Planes Estratégicos de Movilidad Sostenible.