Como acto central del Data Management Spain Summit 2018 en la UPV de Gandia he tenido el honor de participar en una mesa redonda con diferentes expertos del sector.
Aquí he querido resumir mi intervención. El moderador Esteban Rodrigo nos ha pedido una proyección y un esfuerzo en pensar de qué forma los datos van a influir en nuestras vidas en el futuro. Aquí he querido anotar algunos puntos de mi intervención ya que el moderador nos ha pedido tres argumentos.
Reconocimiento Semántico, Chatbots y Domótica
Quizás porque vivo solo, o quizá porque soy un fan de las nuevas tecnología desde algunos meses soy un feliz usuarios de “Google Home” este aparatito que te escucha y te contesta. De momento tiene muchas limitaciones pero el potencial de todo esto es brutal. Ya ni siquiera necesitamos teclear algo “Ok Google”, “Siri dime que”, “Alexa dónde está..” El potencial de estos instrumentos me hace entender que en el 2030 estaremos rodeados de aparatos que, como el genio de la lámpara, van a poder asistirnos en todo. Sobre todo la personas mayores van a poder aprovecharse de esta tecnología, la domótica puede por fin despegar, tu vivienda, tu coche, tu despacho pasa a ser algo activo. La velocidad de procesamiento y la facilidad de encontrar informaciones de forma muy rápida van a dibujar un futuro lleno de datos, de controles, de chatbots. Quizá podamos vivir más plenamente nuestro tiempo libre o quizá no tengamos más tiempo libre. Hablaba de todo ello la semana pasada con Andres “Chatbot” Pulgarin (https://www.linkedin.com/in/andrespulgarin/) verdadero experto en Chatbot que me comentaba que están en un proceso con un importante fabricante de aviones para que todo el mantenimiento de los aaparatos se haga con controles vocales en vez de manuales escritos. Será suficiente llamar y pedir “estoy en el avión modelo x del año ¿donde puedo encontrar el sistema de refrigeración?” y en décimas de segundo el chatbot indicará cuántos pasos se tienen que hacer para dirigirse en la zona, cuales paneles desmontar etc. y dejando al final de todo el proceso un log con lo que se ha pedido por parte de quien y en qué avión”. En el 2030 con el reconocimiento vocal semántico, la potencia de procesamiento y la gran cantidad de informaciones disponibles las máquinas van a darnos respuestas incluso filosóficas basándose en Aristotele o Heidegger. Vamos a ser testigos de una nueva ontología del lenguaje cibernético. Las acciones siguen las palabras pero esta vez las palabras no serán de seres humanos.
2 – Virtualización de Datos Total
Aunque se ha intentado reglamentar en estos años el uso de los datos con regulaciones restrictivas, el Big Data permite analizar metadatos y comportamientos sin que esto afecte a la privacidad de las personas. La suma de grandes cantidades de datos nos va a permitir estudiar patrones. Las empresas en el futuro se intercambiarán datos “no sensibles” para poder crear valor añadido a esta información. Para todo ello la tecnología de punta va a ser la Virtualización de datos que va a permitir tratar los datos sin moverlos de sus fuentes. En el 2030 compras y alianzas de empresas se van a desarrollar en función de los datos que tienen en su posesión. Las relaciones y las informaciones van a ser más importantes de las transacciones. La análisis predictiva se alimenta de grandes cantidades de datos, ya hoy en día algunos sitios web entienden el embarazo de una mujer antes que ella misma lo sepa simplemente analizando sus compras.
3 – Inteligencia Artificial las máquinas nos escuchan
Chatbots, Sensores, IoT van a generar un montón de aparatos inteligentes, no serán sólo los ordenadores y los móviles, cualquier máquina va a poder interactuar con nosotros. Neveras, Microondas, las luces del comedor, el aire acondicionado, la calefacción, la regadera automáticas serán máquinas que escuchan a nosotros y al entorno y que actuarán de consecuencia. Usaremos lenguaje natural. Ya hoy mi reloj me ha dicho dos veces que tengo que moverme de aquí. Y aun no estamos en el 2030 cuando directamente la silla me levantará para obligarme a hacer mis entrenos de Triatlón aunque no tenga gana.
Tampoco voy a poder excusarme diciendo que llueve porque mi reloj sabe que no es cierto.